El mexicano Caín Velásquez mantuvo su corona del UFC

El UFC
160 cerró con la pelea principal entre el campeón pesado, el mexicano Caín Velásquez (11-1), y el retador, el
brasileño Antonio Silva (18-4), en
el hotel MGM Grand de Las Vegas, una vez más la casa de una gran evento de Artes Marciales Mixtas (MMA por sus siglas
en inglés).

Y qué evento. Grandes peleas con nocauts
rápidos y espectaculares.

Pasadas las 9 de noche en Las Vegas, ambos
guerreros se vieron las caras por segunda vez en un año. El 26 de mayo del
2012, se habían enfrentado y Caín se llevó el triunfo con un nocaut en el mismo
primer asalto. Esta noche, Silva
quería cambiar la historia pero el mexicano
no lo permitió.

Tras varios segundos de reconocimiento,
algunos golpes y patadas tiradas, Velásquez conectó un derechazo limpio a la
cara del rival que lo derribó para comenzar el final de Silva. Ya en la lona,
Caín lo castigó con varios piñazos de derecha a la cara y a la cabeza y el referí,
Mario Yamasaki, detuvo el combate a los 1:21 minutos del primer asalto.

Una demostración de lujo del mexicano, que
confirma que es el mejor pesado del mundo y, que sin dudas, es uno de los
mejores libra por libra del mundo.

El triunfo significó la primera defensa
exitosa de Caín Velásquez y dejó lista la tercera pelea entre el campeón y el
excampeón, Junior dos Santos, el
único que ha vencido a Caín y quien noqueó espectacularmente a Mark Hunt, en el combate coestelar. Una
nueva cita imperdible en el UFC.

Esta cartelera tuvo de todo, pero sobre todo
mucha emoción. La próxima cita es el próximo 8 de junio, en Brasil, en el UFC
on FUEL TV 10, con Fabrizio Werdum
vs Antonio “Minotauro” Nogueira como
la pelea principal. Dos pesados que quieren ir por el campeonato que esta noche
mantuvo Caín.

Ese Caín que cada vez que sube al octágono da la impresión que está
haciendo historia, que tiene un potencial para en algún momento ser el mejor
peso pesado en la historia de las MMA.
Así de alto es el techo de este hijo de inmigrantes mexicanos que, como de
costumbre, salió a pelear al ritmo de la música de Vicente Fernández.

Una música que le ha dado muy buena suerte en
su carrera.

Felicidades, campeón.

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